lunes, 23 de agosto de 2010

Adopción de niños por parejas gay: la evidencia de la ciencia

Ya basta de tantas palabras basadas únicamente en experiencias o prejuicios personales. A continuación, un reporte técnico de la Academia Americana de Pediatría -la más importante y reconocida del mundo- acerca de los chicos criados por padres gays (o madres lesbianas), que toma en cuenta toda la evidencia científica disponible en el año 2010:



La posición de la AAP sobre la adopción de niños por parejas gay

Las muestras pequeñas y no representativas estudiadas y la edad joven de la mayoría de los participantes sugieren algunas reservas. Sin embargo, el peso de la evidencia recogida durante décadas usando diversas muestras y metodologías es persuasiva a la hora de demostrar que no existen diferencias sistemáticas entre los padres gays y los no gays en cuanto a salud emocional, aptitudes de crianza, y actitudes hacia la crianza. Ninguna información ha indicando riesgos hacia los niños como resultado de crecer en una familia con uno o más padres gays. Algunos, entre las vasta variedad de formas familiares, historias, y relaciones, podrían probar ser más propicios a la salud psicosexual y al desarrollo emocional que otros.

La investigación sobre la diversidad de relaciones parentales entre los padres gays y lesbianas está simplemente comenzando. Los chicos cuyos padres se divorcian (más allá de su condición sexual) se encuentran mejor ajustados cuando sus padres tienen alta autoestima, mantienen una relación responsable y amigable, y se encuentran viviendo en pareja. Los chicos viviendo con madres lesbianas divorciadas tienen mejores resultados cuando aprenden sobre la homosexualidad de sus madres a una edad temprana, cuando sus padres y otros adultos importantes aceptan la identidad lesbiana de sus madres, y tal vez cuando tienen contacto con los hijos de otras lesbianas y hombres gays.

Padres e hijos tienen mejores resultados cuando las sobrecogedoras tareas de la crianza son compartidas, y los chicos parecen beneficiarse de los acuerdos en los que las madres lesbianas dividen el cuidado de los niños y otras actividades hogareñas en forma igualitaria, como así también cuando el conflicto entre los integrantes de la pareja es bajo.

Si bien los padres gay posiblemente fracasen, a pesar de sus esfuerzos, en la tarea de proteger a sus hijos por completo de los efectos de la estigmatización y la discriminación, su orientación sexual no es una variable que en sí misma prediga su habilidad de proveer un ambiente hogareño que fomente el desarrollo de los chicos.